Todos los días, el adulto promedio mira más de 5 horas de video.

Progresivamente, las generaciones más jóvenes están reemplazando la televisión por cable y los canales televisivos estándar por servicios de transmisión. Estas soluciones les permiten personalizar su experiencia de entretenimiento. Desde Netflix hasta Hulu, las transmisiones están en todas partes, incluso en tus canales de redes sociales.

Cuando plataformas como Twitter e Instagram comenzaron a introducir videos como formato de contenido, la respuesta fue abrumadoramente positiva. El 55 % de las personas afirmó que prestaría mucha más atención a los videos que a cualquier otra forma de contenido. Sin embargo, solo las empresas con acceso adecuado al equipo de video y al software de edición podían obtener provecho del material grabado. El desarrollo de la transmisión en vivo en las redes sociales cambió todo.

¿Qué es la transmisión en vivo en las redes sociales?

A medida que los canales de las redes sociales en todos lados empezaron a permitir la transmisión en vivo, las empresas y las personas comenzaron a compartir contenido sin editar de su vida cotidiana. Esto ayudó a eliminar el estigma de que un video debe contar con una buena producción para tener éxito en línea.

A medida que las audiencias comenzaron a desear una mayor autenticidad para las marcas, los videos genuinos y sin editar crecieron en popularidad. El 80 % de los clientes afirma ahora que prefieren ver un video en vivo antes que leer el blog de una empresa.

Al transmitir en vivo en canales como Facebook o Instagram Live, las empresas crean contenido atractivo que capta la atención y genera el respeto de los clientes. Los beneficios incluyen los siguientes:

  • Mayor participación: El video en vivo les ofrece a las empresas una nueva forma de crear contenido valioso. Participa en sesiones de preguntas y respuestas, debates en vivo y entrevistas que impulsan la participación.
  • Mejores relaciones: Los videos auténticos y sin editar hacen que los clientes se sientan más conectados con las marcas. La gente cree que está viendo el "detrás de escena".
  • Mejor reputación: El video en vivo demuestra la transparencia de una marca. Ayuda a las empresas a generar confianza y lealtad.
    Cómo comenzar una transmisión en vivo

Al igual que cualquier otra campaña en las redes sociales o de marketing, la transmisión en vivo funciona mejor cuando se aborda con una estrategia en mente. Para aprovechar al máximo el contenido transmitido en vivo:

  • Elige tus plataformas: decide dónde vas a transmitir en vivo. Esta decisión debería depender de la plataforma en la que tus clientes pasan la mayor parte de su tiempo.
  • Planifica los tipos de contenido para compartir: a través de la transmisión en vivo, te conectas con los clientes de innumerables maneras. Intenta usar eventos en vivo, contenido detrás de escena, entrevistas, sesiones de preguntas y respuestas, actualizaciones, anuncios, guías prácticas y más.
  • Desarrolla un cronograma: usa herramientas como Sprout Social para saber cuándo está más activa tu audiencia y elabora un plan para transmitir contenido en tus canales de redes sociales en el momento oportuno.
  • Concéntrate en la participación: recuerda que la transmisión en vivo se trata de tener una conversación con tu audiencia. Busca formas de hacer que tus clientes sientan que están interactuando contigo, no solo viendo un video.

Ten en cuenta que la transmisión de videos en vivo no tiene por qué ser perfecta, pero representará a tu marca. Esto significa que, si es posible, debes intentar presentar videos de alta calidad. Invierte en una cámara o un teléfono buenos y asegúrate de probar la calidad del sonido y de la transmisión del video antes de publicarlo.

Cómo optimizar tus transmisiones en vivo

La práctica hace al maestro cuando hablamos de la transmisión en vivo.

Cuanto más explores las características en diferentes canales de redes sociales, más cómodo te sentirás con estas plataformas.

Recuerda que, como cualquier otro aspecto de las redes sociales, también es importante realizar un seguimiento de tus resultados para que el camino hacia la optimización sea más simple. Monitorea cuánto tiempo necesitan tus transmisiones para maximizar la participación y si tus clientes responden mejor a ciertos tipos de contenido.